Spitzkoppe – El arco
Autor de las fotografías y el texto: Isaac Baquero Pérez
La culpa de que termináramos haciendo este viaje, lo tienen dos fotógrafos: Uge Fuertes, y Marsel Van Oosten. Así que animé a la parienta y después de mucho ahorrar, terminamos yendo.
El sur de África nada tiene que ver con Kenya y Tanzania. El color que predomina es el marrón (sobre todo en Agosto, invierno allí), salvo en los sitios por los que discurre un río donde el paisaje se transforma en un pequeño vergel. Desiertos, cañones, salares y cascadas, son un péndulo que oscila de extremo a extremo pero que bien merece la pena ver.
El desierto del Namib, con sus altas dunas rojas, es el más antiguo del mundo.
Y que mejor manera de hacerse una idea de su tamaño que sobrevolarlo, viendo cómo las dunas se extienden hacia el horizonte en todas direcciones.
Otra vista obligada del desierto es contemplar su amanecer, pero, en este caso, casi me resultó más espectacular ver cómo desaparecía la luna justo en el lado opuesto al sol.
Uno de los rincones más famosos de dicho desierto, sino el más famoso, es el Deadvlei. Con sus acacias secas, sus sombras, y los colores de la arena, la verdad es que es un lugar para estar horas fotografiando.
Más de la mitad de los días del viaje, nuestro alojamiento consistía en una tienda de campaña, lo que permitía sacar con relativa facilidad alguna foto nocturna.
Y, por primera vez, me di cuenta de lo que supone que haya tan poca población, no hay contaminación lumínica por ningún sitio. Incluso fotografiando cerca de poblaciones, la Vía Láctea se veía perfectamente.
Oryx
Amanecer en Namibia
Las cataratas Epupa
Carraca de pecho violeta
Spiztkoppe – El otro lado
19 enero, 2015 en 8:05
Se me caen las muelas de la envidia…
19 enero, 2015 en 12:21
También pienso lo mismo ke envidia , espero ir algún día , y gracias Isaac por estas imagenes que nos transportan a ese continente tan especial , graciassssss
19 enero, 2015 en 23:19
Muchas gracias, me alegra saber que os han gustado las fotos.
20 enero, 2015 en 17:59
Magnífico reportaje, muchas gracias Isaac.
Yo también he sentido una gran envidia… hasta que he llegado a la foto de las tiendas de campaña… entonces, he decidido que está muy bien el trabajo de Isaac para conocer la zona y si no, ya están los documentales de la 2… jejeje
20 enero, 2015 en 19:21
Felicidades, un gran reportaje. Yo también muero de envidia y si hace falta ir en tienda de campaña pues voy, jajaja
20 enero, 2015 en 21:20
Jajajaj, la verdad es que aunque parezca mentira las tiendas eran cómodas! Son muy altas, por lo que puedes estar de pie, y dormíamos con unas colchonetas de espuma de 10 cm que aislaban perfectamente del suelo. Eso sí, al tercer día ya tenías ganas de dormir en una cama 😉
20 enero, 2015 en 21:59
Que pasada, el lugar y las capturas!!Menuda envidia! Duermo hasta sobre las piedras si hace falta jaja
18 marzo, 2015 en 16:47
hola, buscando otras cosas he encontrado esta entrada en la que me citas como «culpable» de un viaje a namibia junto con un grande Marsel Van Oosten; todo un gusto que os animarais ir en alguna medida por mis fotos y muy feliz porque me pongas junto a un grande como Van Oosten jeje, Un saludo y a seguir haciendo fotos. Uge Fuertes
3 May, 2015 en 18:59
Muchas gracias a ti Uge. Estuve en la proyección de Namibia que hiciste en Asafona y ya ves, al final terminamos yendo. No por libre como fuisteis vosotros, pero si ahora fuera, conociendo aquello, tenías razón en que es un país que se puede visitar perfectamente yendo sin agencia. Suerte con las fotos y buenas luces!